Como
ya sabéis, pierdo los papeles por un buen relato y me encanta trabajar con
jóvenes creativos, eso me lleva a organizar los talleres y cursos de escritura
creativa de cada año.
Este
julio, cuando finalizamos las clases, quise proponerles un reto. A partir de un
suceso que les narré, les pedí que me enviaran un relato libre de 5 páginas.
Tenían todo agosto para escribirlo.
Entre
los participantes —había más de 25 chavales de entre 10 y 15 años en los
talleres de la Biblio de Les Roquetes y l’Aranya Llibreria—, unos cuantos
destacaron especialmente y fue complicado elegir al ganador pero, después de
deliberar durante dos semanas, quiero felicitar a Marta Verges por su relato Un
motivo para vivir.
Marta,
encontrarás tu premio en la Biblio de Les Roquetes a principios del mes que
viene.
Y
aquí os dejo unos fragmentos de este relato profundo y conmovedor sobre la
depresión y las ganas de vivir.
“El
blanco, es la luz al final del túnel, la esperanza… Pero en la oscuridad en la
que me encuentro no existe el final del túnel, no hay salida. (…) ¿Sabes qué significa
mi nombre? Rio quiere decir ‘motivo para vivir’ y lo gracioso de esta historia
es que yo no tengo ninguno”.
“Un
gato que ha perdido una pata corre con las tres que le quedan. Corre. Corre. No
es algo que resulte triste en absoluto”.
“Mientras
le daba vueltas al asunto, ella se había despertado.
—¿De qué color quieres ser?
Su
voz sonaba algo triste y apagada, era como la voz de un ángel el cual ya
no puede volar”.